Pregunta: Tengo dos años con mi pareja y antes teníamos
relaciones hasta 4 veces por semana. Ahora, solamente una vez por semana y a
veces no siento que él quiere. Yo siempre quiero y él como es más reservado
casi no me expresa las cosas. Pero si nos besamos enseguida tiene una erección
y esto me confunde mucho, pues pienso que no le gusto como antes.
Respuesta: Lo primero que debo decirte, es que contabilizar
los tiempos en que tienen relaciones no es sano ni para ti ni para él, pues
ambos sienten una presión que sólo conseguirá alejarlos más.
Es importante nunca quedarnos en cómo fueron las cosas, pues
al inicio se vive un momento muy diferente.
Es recomendable que aprendas a reconocer ese lenguaje no
verbal que usa tu pareja y le quites tanta importancia al tema de si me dijo o
no, que si expresa o no.
Tampoco debes darle cabida a las suposiciones y ser más
directa con él pero sin atacar, sin comparar, sin hacerlo sentir el culpable de
todos los males en la intimidad, pues cuando usamos la técnica del atacar el
otro, es natural que se ponga a la defensiva y con esto no logramos llegar a
ningún acuerdo.
Qué te parece si por unas cuantas semanas le quitas
importancia al encuentro sexual y haces cosas con él que los acerquen más pero
en otros términos, como por ejemplo, bailar, jugar, besarse por largo tiempo
sin buscar terminar en una penetración, bañarse juntos, retomar las caricias
básicas y claro, validar su amor y que él también valide el tuyo.
Darse un masaje sin tocar los genitales y terminar con un
rico baño y sin gestos de que estás planificando cada paso, dejar que las cosas
fluyan. Dile qué necesitas escuchar de él, qué cosas te hacen bien de su parte.
A veces, la infrecuencia sexual nos habla de la falta de
conexión que muchas parejas hoy en día tienen por sus múltiples ocupaciones.
Volver a lo básico es vital para la recuperación.
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